Gracias a los aportes de los consumidores.
El programa “Changos solidarios” que se realizó durante el año pasado y el actual, finalizó y durante su campaña logró recolectar más de 50 toneladas de alimentos no perecederos, artículos de limpieza y de higiene personal. El éxito del programa ha sido gracias a las donaciones voluntarias de los consumidores y asociados de La Coope, entre otros.
“Changos Solidarios” nació en plena pandemia por iniciativa de un grupo de jóvenes universitarios comprometidos al observar que el COVID-19 agudizó las necesidades de amplios sectores de la población de Bahía Blanca, por las limitaciones de movilidad y trabajo que afectaron a trabajadores informales.
Para dar respuesta la Universidad del Sur y Cooperativa Obrera, crearon el programa “Chango solidario”. El objetivo consistió en recolectar alimentos no perecederos y artículos de limpieza e higiene personal, para entregarlos en comedores, merenderos y organizaciones sociales abocadas a mitigar la crisis alimentaria y sanitaria. Estuvo coordinado por la Subsecretaría de Extensión de la UNS y luego se sumaron otros supermercados y puestos del Mercado Frutihortícola Aguado, donde los participantes armaron bolsones de verduras y hortalizas.
Ahora la campaña llegó a su fin y es tiempo de hacer balances. Los números indican que tomaron parte 35 voluntarios y voluntarias, y que se recolectaron más de 50 toneladas de donaciones en más de 20 comercios donde la gente dejaba su aporte en changos identificados para ese fin. Gracias a esta cadena de favores, llegaron regularmente durante más de 18 meses donaciones semanales a ocho merenderos y comedores bahienses: Patoruzú, de Los Patricios; La Olla Popular, de Villa Harding Green; Manos Unidas, de Villa Moresino; Restaurando el Sueño de Crecer, de Villa Miramar; Abuela Elena en Villa Duprat; el Centro San Ignacio de Loyola, en Spurr y un comedor de Loma Paraguaya. Además esporádicamente se enviaron alimentos y productos de higiene a 15 organizaciones, incluso armando combos especiales para familias con celíacos.
Es conmovedor como ante una crisis tan significativa la comunidad se organizó cooperativamente para combatir los efectos adversos de la pandemia.
Fuente: www.uns.edu.ar